Uno de los avances para asistir e incrementar la posibilidad de sobrevivencia de los bebés que nacen prematuramente (aquellos con menos de 25 semanas de gestación), son los úteros artificiales, dispositivos diseñados para mantener el crecimiento y desarrollo del embrión humano prematuro fuera del útero. Estas matrices imitan la estructura y la función del útero humano, proporcionando un entorno óptimo para que el bebé prematuro sobreviva, monitoreando y regulando cuidadosamente las condiciones en su interior gracias a sensores integrados y sistemas de control automatizado, proporcionando así un espacio seguro y saludable donde el bebé puede alcanzar su desarrollo completo y pleno antes de “nacer” al mundo exterior.
A pesar de que estos dispositivos han sido probados con éxito en corderos y cerdos (Figura 1), cuyos embriones en gestación han sido mantenidos vivos por varios días [1,2], se tiene una gran incertidumbre sobre los resultados que esta tecnología pudiera alcanzar con humanos [3].
Existe una alta tasa de morbilidad y mortalidad en bebés que nacen antes de las 22 semanas, probabilidades que se reducen en la medida en que el bebé nazca con mayor tiempo de gestación. Cuando un embrión en formación nace de forma prematura, sus pulmones aún no se encuentran lo suficientemente maduros para respirar aire, por lo que necesitan estar protegidos del ambiente externo y recibir el oxígeno y los nutrientes para el desarrollo a través del cordón umbilical, mientras sus pulmones están protegidos por el líquido amniótico. Actualmente, estos bebés son puestos en incubadoras que les brindan condiciones para poder seguir su desarrollo. No obstante, al ser estas un espacio lleno de aire, no brindan completamente el ambiente seguro que el bebé prematuro necesita para su desarrollo adecuado, y es frecuente que los bebés que sobreviven a este escenario presenten durante su vida problemas de salud tales como enfermedades neurológicas, sordera, dificultad en el movimiento u otros problemas acarreados por el desarrollo incompleto en en vientre materno [4,5].
En estas condiciones, los úteros artificiales brindan un ambiente donde el embrión prematuro es puesto en el interior de una bolsa que contiene un líquido amniótico sintético que aisla al feto del ambiente exterior mientras que se le suministran todos los nutrientes, hormonas y oxígeno tanto a través de este líquido como del cordón umbilical, conectado a su vez al sistema de control de este dispositivo (Figura 2).
Son dispositivos muy promisorios para ayudar a la sobrevivencia del gran número de bebés prematuros que nacen mundialmente, pero que a su vez trae posiciones sociales y éticas encontradas.
Por una lado, los úteros artificiales tienen el potencial de revolucionar la forma de la concepción y el embarazo. Podrían ofrecer una solución para las mujeres con problemas de infertilidad o que no pueden llevar un embarazo a término a causa de complicaciones médicas, mientras que eliminan varios de los riesgos asociados con el embarazo, como la preeclampsia, el parto prematuro y las complicaciones durante el parto.
Por otro lado, los úteros artificiales plantean una serie de aspectos éticos y sociales como por ejemplo la idea que se tiene sobre la maternidad, la subrogación, el alcance que tendrá sobre la salud y calidad de vida del embrión allí gestado, la maternidad asistida, entre otros [6,7].
Los avances tecnológicos y éticos resolverán estas inquietudes en los próximos años.
Referencias
- E. Partridge, M. Davey, M. Hornick et al., «An extra-uterine system to physiologically support the extreme premature lamb», Nature Communications 8, 15112, abril de 2017. https://doi.org/10.1038/ncomms15112.
- Women and Infants Research Foundation, «Artificial womb EVE Therapy». Women and Infants Research Foundation Newsletter. [En línea]. Disponible en: https://wirf.com.au/Our-Research/Case-Studies/Artificial-womb-EVE-Therapy. Consultado el 13 de mayo de 2024.
- C. Willyard, “Everything you need to know about artificial wombs”. MIT Technology review. Septiembre de 2023. [En línea]. Disponible en: https://www.technologyreview.com/2023/09/29/1080538/everything-you-need-to-know-about-artificial-wombs/#:~:text=An%20artificial%20womb%20is%20an,biobag%2C%E2%80%9D%20surrounded%20by%20fluid. Consultado el 13 de mayo de 2024.
- Vitara Biomedical Inc, “A New Era in Neonatal Care”. Vitara Biomedical Inc. [En línea]. Disponible en: https://www.vitara.com/. Consultado el 13 de mayo de 2024.
- Perinatal Life support, “PLS System, Perinatal Life Support explained”. [En línea]. Disponible en: https://perinatallifesupport.eu/. Consultado el 13 de mayo de 2024.
- N. Williams, «The Pros and Cons of Artificial Wombs». News-Medical. Agosto de 2023. [En línea]. Disponible en: https://www.news-medical.net/health/The-Pros-and-Cons-of-Artificial-Wombs.aspx. Consultado el 13 de mayo de 2024.
- A. Vidal Egea, “Some feminists believe that artificial wombs will be an antidote to the patriarchy, but the prospects are not so clear”. El País. Diciembre de 2023. [En línea]. Disponible en: https://english.elpais.com/technology/2023-12-26/some-feminists-believe-that-artificial-wombs-will-be-an-antidote-to-the-patriarchy-but-the-prospects-are-not-so-clear.html. Consultado el 13 de mayo de 2024.